Nos creemos muy modernos porque llevamos smartphones de última generación que usamos para contarle al mundo lo que nos hemos comprado en rebajas, lo que hemos comido, o el último súper viaje que hemos hecho, llevamos los tejanos rasgados, nos rapamos un lado de la cabeza, piercings, tatuajes, tenemos amigos gays, lesbianas, nos vamos de alquiler, acumulamos royos de una noche, comemos comida envasada por que no tenemos tiempo de invertir en comida de verdad, defendemos el derecho a la libertad y el amor libre por encima de todo, y cómo lo hacemos, escribiendo en nuestras redes eslogáns que quedan muy bien y nos hacen sentir muy "cool".
Pero todo eso forma parte de la juventud porque cuando cumples cierta edad, tienes que sentar la cabeza y eso significa casarse y tener hijos, sobre todo si eres una fémina, por que si no lo haces serás considerada: rara, freak, o quizás demasiado insoportable para que nadie te haga caso, desesperada, y lo peor: voces de otras mujeres que sentencian frases como la de arriba, tan hirientes y mortales que ni siquiera eres capaz de responder, tu cerebro intenta recomponer las piezas y siempre hay algunas que no encajan.
No tiene que ver ni con la edad, ni con los estudios, ni el estatus social, ni el sexo o la religión, esto es un tópico social generalizado que alcanza por igual sin discriminación posible.
¿Conocéis a las NoMo? No Mothers, alguna sí está casada, para todo hay un club, sólo elige a cuál te unes sin importar lo que dirán de nosotras.
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